Este jueves es el comienzo de una nueva temporada del torneo superior en FeBAMBA. Y Estudiantil Porteño integrará el grupo 2 de la Conferencia Oeste, junto a Huracán San Justo, Cedem, Nolting, GEI y Defensores de Hurlingham, rival de este jueves en el debut del equipo dirigido por Juani González.
Quinta temporada del entrenador a cargo del conjunto que intentará defender en principio la semifinal del año pasado, y por qué no, superarlo e ir por el gran salto en los campeonatos de la Federación. Al menos, es lo que propone Javier Sánchez, quien con este campeonato inicia su séptima temporada en nuestro club. Como alguien ya integrado a la familia de Porteño, es una de las voces autorizadas para hacer la previa del cotejo de este jueves. «Ya siete años en el Club!! Me siento uno más…. estamos con muchas ganas de empezar y realizar el mejor papel posible. Queremos este año poder ser campeones. Creo que tenemos muy buen plantel, los chicos vienen sumando experiencia ya hace un tiempo y con la llegada de David, un pivote determinante para esta liga, estoy convencido de dar pelea bien arriba», dice el Misionero en el comienzo de la charla. En la plantilla, la preponderancia de los jóvenes, con un año más de experiencia, y la savia nueva para ir haciendo la transición de la renovación en el plantel. Aún en medio de ese proceso, Javier continúa firme como referente de sus compañeros con década y media menos en edad y experiencia.
«A la mayoría los veía de chiquito y ahora jugando juntos me da mucha alegría, porque es un plantel de un enorme valor humano. Ser referente de un equipo te pone bien y más si a los chicos los conocés de chico; es muy bueno sentirse a gusto y más si podés aportar la experiencia a quienes vienen creciendo a pasos agigantados!. Por suerte me siento a gusto en el club; es lo más importante para un deportista estar bien en todos los sentidos», expresa. La pregunta surge sola: ¿por qué estás cómodo en Porteño? «Con el tiempo que tengo como jugador y haber recorrido por muchos clubes y conocido muchas gente; uno se da cuenta del valor humano y la verdad en Porté hay muy buenas personas. Y eso le hace al jugador sentirse bien y respaldado porque uno sabe con las personas que se está rozando». Repaso al campeonato del año pasado, donde el entonces campeón, Caza y Pesca, los eliminó en una llave de altísimo nivel, y un juego en casa espectacular, definido sobre la chicharra en prórroga. «Veníamos jugando de menor a mayor, porque contra All Boys hicimos un juego muy bueno; ue una lástima no haber podido llevar a tercer partido contra Caza y Pesca», dice. Al principio, menciona la posibilidad de ver a un Porteño campeón, y entonces la consulta es cuáles son los fundamentos para sostener dicha afirmación. Y el Misio responde: «Con el trabajo que se viene haciendo, ya va a llegar el momento y esperemos sea en un lapso corto así puedo estar como jugador, aunque no se note tengo 36 pirulitos (risas). Estamos con la expectativa de este año se pueda dar lo que venimos buscando hace un tiempo; con trabajo todo se logra». Al hacer referencia a su edad, la pregunta es sobre si a veces pasa por su cabeza la posibilidad de dejar, o encarar la temporada con la idea de ser la última. «La verdad me siento bien física y mentalmente, eso es lo importante!! Hay Misio para unos años todavía, mínimos tres más. Después a pensar y ver cómo estoy para seguir; mientras tanto estamos firme (risas)» Desde el cuerpo técnico está la certeza que trabajando en esta línea, en algún momento se saldrá campeón. Eso tal vez pueda llevar algunos años, y probablemente Javier ya haya decidido retirarse; pero no caben dudas en verlo como una parte importante e indispensable si un día Porteño levanta el trofeo como campeón. Con o sin él. «Se tiene q dar el campeonato dentro de muy poco, este año estamos muy bien y estamos trabajando para hacer un muy buen papel», asegura. Para el final, un breve análisis de la participación en el Torneo Federal que concluyó la semana anterior. «Tuve la suerte de poder acomodar mis horarios y poder jugar el Federal; eso en lo personal es bueno porque uno sigue sumando experiencia!! ¿El gusto amargo que me llevo? Con el equipo disponible, podíamos estar mucho mejor y a veces por muy poco no nos llevábamos los partidos, les dimos pelea a todos. Siempre nos faltó esa pizca de suerte . Pero lo bueno es que el semillero de Porte pudo vivir algunos como jugadores y otros como hinchas, un torneo nacional», finaliza. Javier Sánchez, el Misionero. Arranca su temporada siete en el club, con la misma expectativa de siempre y el deseo de consagrarse como campeón del torneo metropolitano.